Se trata de
un bizcocho bastante compacto, de cocción lenta. Este bizcocho es uno de los más utilizados para elaborar tartas
decoradas con fondant. Es un bizcocho intenso, de miga prieta, pero a la
vez suave. Además, es fácilmente moldeable, no se
desmiga, por lo que puedes tornearlo a tu gusto. Este tipo de bizcochos queda bastante seco, por lo que es
imprescindible bañarlo con un almíbar.
Ingredientes:
Es importante que todos los ingredientes estén a temperatura ambiente.
4 huevos
200g de mantequilla sin sal o margarina.
200 gr de azúcar
300 gr de harina
1/2 sobre de levadura en polvo de repostería
1 pizca de sal
Aroma, el que más os guste: la ralladura de un
limón o una naranja, una cucharadita de esencia de vainilla, de
almendra, agua de azahar, azúcar avainillado, 25 gr de chocolate en polvo amargo, especias, etc....
La receta es para un molde pequeño, de 20cm de diámetro. Para hacer los bizcochos rectangulares de esta foto (eran 2 bizcochos rectangulares) tube que poner 6 huevos para cada bizcocho y ampliar todos los ingredientes.
PREPARACIÓN SIN THERMOMIX:
Precalentar el horno a 170º
.
En primer lugar, todos los ingredientes tienen que estar a temperatura ambiente. Se bate la mantequilla a punto de pomada con el azúcar en una batidora eléctrica de varillas hasta lograr que la crema esponje. Se van añadiendo los
huevos de uno en uno,
y sin dejar de batir. No añadir el siguiente hasta que el anterior
esté perfectamente mezclado, cuando estén todos los huevos bien integrados se añade el aroma elegido y se mezcla un poquito más.
Se pone la batidora en la velocidad mínima y se va incorporando la
harina tamizada poco a poco, a cucharadas, hasta que esté toda la harina
incorporada.
Se engrasa y enharina un molde adecuado para el horno.
Bajamos el horno a 160º y horneamos el
bizcocho unos 40 minutos o hasta que al pincharlo con un palillo, o
brocheta, salga limpio. Antes de los 30 minutos no se debe abrir la
puerta del horno.
Se puede programar el horno 40 minutos y
luego se va mirando cada diez minutos. Comprobaremos
que está cocido introduciendo una aguja en el centro, si sale sin
restos de masa adherida, significa que ya está hecho, en caso contrario,
dejarlo más tiempo e ir controlando hasta que esté bien horneado.
Hay que tener paciencia es un
bizcocho que tiene una cocción muy lenta, y dependiendo de la cantidad
de veces que hayáis incrementado la receta, más larga será la cocción.
Se debe decir que también depende de cada horno y del molde utilizado
para la cocción del bizcocho (material, forma y medida).
Si veis que se está tostando mucho la
parte superior del bizcocho y todavía está crudo por dentro, cubrirlo
con un poco de papel de aluminio.
Una vez terminado, se saca del horno, se deja reposar 5 minutos
y se desmolda sobre una rejilla para que termine de enfriarse. Después,
se cubre totalmente con un plástico film y se deja asentar.
Es conveniente hacerlo 24 horas antes de utilizarlo para que se asiente
el bizcocho y sea más fácil el torneado y la división en capas.
Es un bizcocho que aguanta muy bien el paso
del tiempo (2 ó 3 días), siempre que se conserve adecuadamente cubierto
de film siempre teniendo en cuenta la temperatura ambiente y la humedad. Este bizcocho permite la congelación, de hecho es recomendable si va a ser torneado.
PREPARACIÓN SIN THERMOMIX:
Es importante que todos los ingredientes estén a temperatura ambiente.
Precalentar el horno a 170º
Engrasamos con mantequilla y enharinamos el molde que vamos a utilizar para la cocción del MSC.
Ponemos en la TH el azúcar y la
mantequilla. Programamos 10 minutos velocidad 4. De esta manera
conseguiremos una mezcla cremosa y suave. Al final habrá doblado su
volumen.
Mientras trabaja la TH tamizar la
levadura, la harina y la sal en un bol. Añadimos el aroma elegido en
caso que sea un ingrediente seco (azúcar avainillado, vainilla en polvo,
especias, cacao en polvo...)
Una vez acabe la TH de trabajar el
azúcar y la mantequilla, con la TH en marcha a velocidad 4 se
incorporan los huevos, uno a uno, por el brocal.
Sin parar la TH se le añade cucharada a
cucharada por el bocal la harina con la levadura y el aroma a velocidad
4. Si vemos que le cuesta mezclar se sube un poco la velocidad. En caso
que el aroma elegido no sea seco, sino líquido se le añade en este
momento a la masa (esencia de vainilla, de almendra, agua de azahar,
etc..) .
Se engrasa y enharina un molde adecuado para el horno.
Bajamos el horno a 160º y horneamos el
bizcocho unos 40 minutos o hasta que al pincharlo con un palillo, o
brocheta, salga limpio. Antes de los 30 minutos no se debe abrir la
puerta del horno.
Se puede programar el horno 40 minutos y
luego se va mirando cada diez minutos. Comprobaremos
que está cocido introduciendo una aguja en el centro, si sale sin
restos de masa adherida, significa que ya está hecho, en caso contrario,
dejarlo más tiempo e ir controlando hasta que esté bien horneado.
Hay que tener paciencia es un
bizcocho que tiene una cocción muy lenta, y dependiendo de la cantidad
de veces que hayáis incrementado la receta, más larga será la cocción.
Se debe decir que también depende de cada horno y del molde utilizado
para la cocción del bizcocho (material, forma y medida).
Si veis que se está tostando mucho la
parte superior del bizcocho y todavía está crudo por dentro, cubrirlo
con un poco de papel de aluminio.
Una vez terminado, se saca del horno, se deja reposar 5 minutos
y se desmolda sobre una rejilla para que termine de enfriarse. Después,
se cubre totalmente con un plástico film y se deja asentar.
Es conveniente hacerlo 24 horas antes de utilizarlo para que se asiente
el bizcocho y sea más fácil el torneado y la división en capas.
Es un bizcocho que aguanta muy bien el paso
del tiempo (2 ó 3 días), siempre que se conserve adecuadamente cubierto
de film siempre teniendo en cuenta la temperatura ambiente y la humedad. Este bizcocho permite la congelación, de hecho es recomendable si va a ser torneado.